Policías borrachos

A continuación, la versión de RPP

Martes, 24 de Febrero del 2009

Cabanillas ordena separación de policías ebrios que provocaron accidente
http://www.rpp.com.pe/detalle.php?nid=166431
Escuchar audio con declaraciones de Cabanillas

Dos miembros de la PNP en estado etílico chocaron el auto donde iban contra otro en el distrito de Surco.

Tras el accidente ocurrido por las inmediaciones del centro comercial Jockey Plaza donde el capitán Pedro Deza Loyaga y la suboficial Dora Gil Muñoz de la Policía Nacional del Perú estuvieron envueltos, la ministra del interior, Mercedes Cabanillas, se pronunció al respecto.

"Han consumido licor juntos y bueno laboraban en la unidad de servicios especiales de Vitarte porque ahora tendrán separación definitiva. Yo misma me he dirigido a la comisaría de Monterrico para cautelar que el dosaje etílico cumpla con arrojar las dosis reales de consumo de licor. Tengo el certificado en la mano, el capitán tenía 1.18 y la suboficial 1.01. Sin duda son faltas gravísimas", dijo en declaraciones a RPP.

En tal sentido, Cabanillas dijo que lamentan que aquellos hechos dañen el uniforme de la policía. "Son personas descalificadas que hacen tanto daño a la institución que está haciendo un gran esfuerzo por recuperar la confianza y la adhesión ciudadana", indicó.

A continuación, la versión de El Chino

Capitán choborra arrolla a 2 taxistas
El Chino, 25/02/2009

ABANDONO CHAMBA CON TOMBITA Y SE FUERON DE JUERGA. MECHE YA LES DIO DE BAJA

Jamás lo olvidarán. Un capitán y una suboficial de tercera de la PNP serán dados de baja, ya que en pleno acto de servicio libaron en abundancia, condujeron un auto y provocaron un triple choque, resultando a causa de ello dos taxistas heridos.

Los involucrados son el capitán Pedro Deza Noyama (42) y la suboficial de tercera Dora Gil Muñoz (23). Según versiones oficiales, la pareja adscrita al Servicio de Operaciones Especiales (SOES) de Vitarte se encontraba de servicio, pero decidieron ausentarse para irse a una fiesta.

Deza Noyama pidió permiso a sus superiores para realizar una supuesta diligencia familiar, encontrándose a los minutos con Dora Gil, quien sería su amante.

Al parecer todo había salido según lo planeado, ambos pasaron la noche bebiendo licor y divirtiéndose hasta altas horas de la madrugada, cuando sin medir las consecuencias, a las 5:00 de la mañana, abordaron el auto Volkswagen rojo de placa AQ–3224 en dirección a su dependencia policial.

Empero, la mala combinación de alcohol y velocidad pasaron factura. El capitán Deza se quedó dormido e impactó contra un grupo de taxis estacionados en su paradero de la cuadra 42 de la Av. Javier Prado, a la altura del Jockey Plaza, en Monterrico.

Como consecuencia de ello, el taxista Jorge Pacheco Velásquez y su compañero David Chávez Hidalgo, quienes se encontraban conversando parados frente a sus vehículos, llevaron la peor parte al quedar atrapados entre sus unidades, que colisionaron producto del múltiple choque provocado por el oficial de la policía. Los heridos fueron derivados al hospital Hipólito Unanue.

Escándalo

El Volkswagen rojo de placa AQ–3224 no tenía SOAT y los gastos hospitalarios de Jorge y David han tenido que ser cubiertos por sus familiares, aunque sus heridas no son de gravedad, pero les han dado 15 días de descanso médico más medicinas.

Según manifiestan los familiares de las víctimas, el capitán Deza, en una primera instancia, no quería reconocer su responsabilidad y solicitaba la presencia de su abogado, pero tuvo que retractarse cuando llegó la plana mayor de la PNP y la ministra del Interior, Mercedes Cabanillas, asumiendo su responsabilidad en los hechos.

Les darán de baja

Por otro lado, la ministra del Interior señaló que la pareja de policías involucrada en dicho accidente será separada definitivamente de la institución por haber cometido una falta muy grave.

“Lamento que hechos que cometen personas descalificadas para portar el uniforme de la Policía Nacional hagan tanto daño a una institución que está haciendo un gran esfuerzo por recuperar la confianza y la adhesión ciudadana. Los responsables serán separados definitivamente”, manifestó.

Señaló que el capitán y la suboficial cometieron una falta grave al estar en servicio y consumir licor, además de haber obtenido un permiso para abandonar su lugar de trabajo engañando a sus superiores.

“Yo misma me he dirigido a la comisaría de Monterrico para cautelar, porque esa fue mi primera preocupación, que el dosaje etílico cumpla con arrojar las dosis reales del consumo de licor. Según las pruebas practicadas, el capitán registra 1,18 gramos por litro y la suboficial 1,01. Estas son faltas gravísimas. Si a ello le añadimos que el mismo reglamento de disciplina policial señala que en caso de consumo etílico y/o de drogas comete un accidente de tránsito o atropella a una persona y le ocasiona lesiones graves o la muerte, no hay otra solución que la separación definitiva de los efectivos”, expresó la titular del Interior.

Cómo estará la confianza en la policía que la misma ministra en persona tuvo que ir a ver que no le pasen un dosaje etílico bamba. Un noticiero de tv denunció que los policías que se llevaron a estos policías borrachos los encubrieron para que las cámaras no los filmen.

A continuación, nota de Ojo

EX DIRECTOR DE PNP ADVIERTE QUE PROCEDIMIENTO PARA SANCIONAR ACTOS DE INDISCIPLINA, COMO EL DEL CAPITAN Y SUBALTERNA BORRACHOS, TARDA MAS DE UN AÑO

Burocracia impide botar malos policías
http://www.ojo.com.pe/nota.php?nota_id=44082

Tras los escandalosos hechos que empañan a la Policía , como el accidente protagonizado por una pareja de efectivos en estado de ebriedad, o la difusión de un video en Internet en el que una agente aparece desnuda, el ex director de la PNP, Eduardo Pérez Rocha, lamentó que el procedimiento para sancionar sea engorroso y el castigo se dé luego de un año en el mejor de los casos.

Precisó que el reglamento policial pasa por etapas burocráticas parecidas a las del Poder Judicial y así las sanciones se dan luego de un largo tiempo. Por ello, concordó con la ministra del Interior, Cabanillas, quien días atrás anunció modificaciones en el reglamento policial para fortalecer la disciplina, debido a que el actual es muy blandengue y permisivo.

Pérez Rocha sostuvo que las faltas en torno al accidente ocasionado por un capitán y una subalterna son graves, pues se cometió abandono de servicio (permiso con motivos falsos), infracción con uniforme policial, consumo de bebidas alcohólicas, responsabilidad del siniestro que dejó heridos (como autoridad debió dar ejemplo), no tenía Soat el vehículo y otros.

Son actos de indisciplina y hay que destacar la mano dura de la ministra del Interior (Mercedes Cabanillas), pues no se puede concebir que quien hace cumplir la ley, no la cumpla. Aparte está la denuncia vía judicial, dijo.

Manifestó que a sabiendas de las normas que prohíben las relaciones extramatrimoniales, la pareja de policías cometió la falta. Indicó que uno de los factores que conducen a estos casos podría ser la convivencia de 24 horas, pues en la práctica pasan un día completo con los colegas, de ahí que urge persistir en una cultura de valores y respeto. Recomendó que la instrucción policial debe ser una constante en la familia policial, pero lamentablemente creen que acaba con la formación en la escuela PNP. Se debe establecer capacitaciones continuas sobre sus funciones, buen comportamiento, moral, valores, etc., anotó.

El ex director de la PNP dijo que no es rara la ocurrencia de actos irregulares dentro de la institución, pues lamentablemente muchos no salen a luz por una escasa cultura de denuncia. Refirió que en sus 32 años de servicio ha visto casos de faltas, relaciones entre el personal, abuso de autoridad y otros, aunque subrayó que no sólo comete actos irregulares el que instiga, según las normas disciplinarias también lo hace el que acepta y no denuncia. Algunas policías pueden verse afectadas por presiones de sus superiores, pero de ellas dependerá si aceptan o no, conocen las normas y el reglamento. Si un jefe propone u ordena que me vista de civil o con bikini e ir a la playa, no voy a obedecer al pie de la letra, apuntó. Agregó que en la investigación de un caso así, se puede concluir que hubo abuso de autoridad, pero también la otra persona puede convertirse en cómplice de la figura delictiva, por avalar el hecho irregular al no denunciar en su momento, anotó.