sábado, 17 de enero de 2009

Nuestro pésame a la familia Quintana Colán

El asalto del Banco de Crédito en Villa El Salvador ha concitado el interés de muchos. Las Águilas Negras han sido tocados una vez más por la muerte, proveniente de los criminales profesionales, de aquellos que sólo sirven para el crimen y viven de él.

La muerte del policía Jesús Quintana Colán debe constituirse en la gota que derramó el vaso, pues de otra manera las muertes y el luto en la familia de los policías seguirá creciendo.

La policía es el único medio inventado hasta ahora para defendernos de los indeseables. Sin embargo, esta, la policía debe mantenerse sin mancha para que siga contando con la confianza de la gente.

No hace mucho, una ministra decía que el veinticinco por ciento de la policía era corrupta. Con esa cifra, qué podemos esperar. La policía se ataca ella misma al conservar a estos elementos.

Debemos asegurarnos de que la policía trabaje para el lado de la seguridad ciudadana y no se coluda con el crimen, sea éste organizado o desorganizado. Las coimas están grabadas en cualquier noticiero. Esa corrupción hace crecer nuestra indefensión.

Con la certeza de que podemos confiar verdaderamente en la policía, podemos acudir a ella, pues de lo contrario, estamos a merced de los delincuentes. A la policía le hemos delegado la misión de protegernos, por ello debemos cuidarla.

La muerte de Jesús Quintana Colán, de manos de un "gatillo alegre", léase "pobre desgraciado", quedará impune si luego de que sea capturado, junto con sus otros secuaces, los jueces venales los vuelven a poner en la calle. Si ese fuera el caso, estamos avalando nuestro propio suicidio.

A todo esto, el reciente robo en la tienda La Curacao, de Chosica, sólo agrava el malestar ciudadano y nos lleva a pensar que si tremendo emporio ha sido violado en su integridad, qué podemos esperar el resto de los ciudadanos.

Las noticias (como ejemplo sólo basta ver diariamente el Reporte Policial del Diario Ajá) sobre estos indeseables cada vez son mayores. Pronto nos revolcarán peor que un huracán.

Que el policía muerto, y que acaban de llorar y enterrar, sea el último caso. Basta ya.

3 comentarios:

  1. Muy sospechosa la forma en que aniquilaron al valiente heroico policia Quintana Colan.

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  3. me parece que fue un ajuste de cuentas por que fueron 10 ladrones y solo robaron 30000 soles osea 3000 cada uno

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