A continuación, la versión de El Chino
25/10/2009
Colectivero era seco “al paso”
La policía dio un paso importante al aprehender a uno de los integrantes de una peligrosa banda de secuestradores “al paso”, que operaban bajo la apariencia de colectiveros en la ruta Lima-Chorrillos.
La modalidad de estos malhechores era captar pasajeros, para luego en el camino desviarlos de la ruta y llevarlos a los cajeros automáticos, donde los despojan usualmente de 500 soles.
Según la policía, estas bandas operan en grupo de cuatro personas y utilizan un auto station wagon blanco, con el cual fingen ser transportistas. La ruta más utilizada suele ser la que cubre la vía Expresa entre Lima y Chorrillos. En tanto, sus víctimas preferidas son las mujeres.
En esta oportunidad se supo que el atraco se registró en la avenida Aramburú, donde el conductor del vehículo se detuvo con la supuesta intención de recoger más pasajeros, pero terminaron subiendo sus tres cómplices provistos de armas de fuego, los cuales sin miramiento alguno terminaron intimidando a la dama.
Con la frase “no te preocupes, nosotros solo somos choros, no te vamos a hacer nada”, los facinerosos proceden a robar todo lo que tiene la pasajera, como celulares y hasta laptos, entre otros, para posteriormente vaciar las tarjetas de crédito.
Uno de los detenidos, que ha sido plenamente identificado por sus agraviadas, es
-Carlos Manuel Núñez Pérez (40),
quien sería el encargado de amedrentar a sus víctimas, insultándolas y golpeándolas si era necesario.
Ante ello el coronel PNP César Cortijo, jefe de la unidad de Robos de la Dirincri, hizo un llamado a las personas que habrían sido víctimas de estos hechos para que se acerquen a las oficinas de la Av. España a reconocer al individuo y proceder a la denuncia pertinente.
“Es muy importante que las personas que han sido víctimas de asalto bajo esta modalidad se acerquen para que puedan presentar su denuncia y ayuden a capturar al resto de la banda”, recalcó Cortijo.
Hay que resaltar que estos sujetos no serían unos principiantes, ya que mientras los cuatro roban a la pasajera, hay un segundo auto detrás de ellos con lunas polarizadas que los vigila para ver si se presenta algún inconveniente.
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