SJL: Le clavan cuchillo cuando salía de discoteca

A continuación la versión de Trome

Martes 18 de octubre 2011

'Cuatro bolas' en crimen de quinceañero

El sujeto le habría clavado cuchillo cuando salía de discoteca, en San Juan de Lurigancho.

Por: M. Rochabrum
http://trome.pe/actualidad/1319602/noticia-cuatro-bolas-crimen-quinceanero

Tenía apenas 15 años y ya estaba a punto de convertirse en papá. Acudió a una discoteca para despedirse de sus compañeros del colegio que tuvo que dejar, pero al salir fue rodeado por unos sujetos, uno de los cuales lo degolló con un cuchillo de cocina, en San Juan de Lurigancho.

Efectivos de la Divicri de dicho distrito indicaron que a las 2 de la madrugada, el quinceañero Orlando M.G., conocido como “Loquito”, salió con un grupo de amigos de la discoteca “Mr. Big”, ubicada en el paradero 4 de Mariscal Cáceres. A unos metros del lugar salieron a su encuentro varios muchachos, entre ellos un tal “Cuatro bolas”.

LE CORTÓ LA YUGULAR

“Este sujeto lo agarró del cuello, sacó un cuchillo y le cortó la yugular a la víctima”, dijo un detective a cargo del caso. El autor del crimen arrojó el arma y fugó con sus amigos.

Al hacerse cargo de las investigaciones, los detectives interrogaron a varios amigos de la víctima, quienes proporcionaron las características físicas y el apodo del homicida.

Poco después llegó Marcelino Martínez (51), quien tuvo la penosa tarea de reconocer a su hijo.

“A mi hermano intentaron robarle su billetera, por eso lo degollaron”, dijo, a su vez, Walter Martínez. Luego, los policías trasladaron el cadáver del adolescente a la Morgue de Lima.

Más tarde, un equipo especial de la Divincri atrapó al presunto autor del homicidio, que fue identificado como

-Julio César Ochoa Tanta (18),

en una casa del asentamiento humano “Cruz de Motupe”. “No me acuerdo de nada, no sé lo que hice”, refirió el muchacho.

TESTIGOS

Los policías informaron que el chiquillo intervenido fue reconocido por los testigos que vieron cuando atacaba con el cuchillo al menor. Se investiga si fue por alguna rivalidad.

La víctima, que era hincha de la “U” y esperaba con alegría a su primer hijo, trabajaba como ayudante de albañil con su padre.